jueves, 31 de mayo de 2012

Me bastó tan poco para quererte tanto y sucedió que poco a poco me fui entregando... Como entender lo que sentí. Y sin evitarlo, ya me había hecho tuya. Sin quererlo, empecé a pensarte. Sin quererte amar, me perdí en ti. Enamorándome de tu corazón. Queriendo tus brazos. Anhelando tus besos. Deseando tu cuerpo. Y es que el momento surgió tan rápido. Te tuve entre mis brazos y sin saberlo, comencé a quererte. 



Hoy, doy gracias a dios por darme la oportunidad de tenerte junto a mí. Prometo no desaprovecharla.

1 comentario:

  1. Es precioso lo que escribes! me encanta! asi que no más te sigo :)
    Un besito desde:
    http://disfruta-del-amor.blogspot.com.es/
    Pasate por mi blog, y si te gusta.. sígueme ;)

    ResponderEliminar

Tienes un comentario!