Hoy es uno de esos días
en los que necesito de tus abrazos.
Y tú no estás,
y hace tiempo que te fuiste.
Pero hoy daría lo que fuera
porque eso no hubiera pasado.
Porque estuvieras a mi lado
y me cogieras de la mano.
Me acariciaras el pelo
y me dijeras que estás conmigo
que siempre lo has estado.
Hoy, te miraría a los ojos
y te diría que la guerra contigo
me valía la pena.
Que siempre lo has hecho,
y mucho más que eso.
Hoy desearía tener
esas tardes de peli y manta
que tanto nos gustaban.
Y quizá,
si fuese valiente,
te escribiría ese mensaje
diciéndote
que te quedes un poco más,
que no te vayas.
Que no quiero tenernos que perder
para darnos cuenta que
era lo que queríamos.
Pero no puedo
o no debo.
Y no sé qué me duele más.